Las empresas deben invertir tiempo y dinero en programas y formaciones de liderazgo empresarial para minimizar errores y maximizar resultados.
El éxito de una empresa en gran parte recae en su capital humano.
A pesar de la alta demanda de mano de obra, a las empresas les resulta cada vez más difícil encontrar personal con las habilidades correctas. Un informe de Deloitte HR Trends muestra que el liderazgo efectivo y el desarrollo están entre las prioridades más importantes para las compañías.
La buena noticia es que un líder se puede hacer y no necesariamente tienes que buscarlo externo a tu empresa.
¿Por qué esperar a que nazca si lo puedes hacer tú mismo ?
Las empresas deben estar dispuestas a invertir dinero y tiempo en la formación de sus futuros líderes. Una encuesta de Proinspire confirma que un 50% de directivos no tuvieron el conocimiento, experiencia o recursos para ser exitosos. Un 96% indicaron estar interesados en formación o desarrollo de programas de liderazgo empresarial.
En este post te daremos 6 razones para convencerte de porque debes invertir en formación de liderazgo dentro de tu empresa:
Un buen líder asegura que la cultura empresarial se mantenga en curso. La visión, misión y valores es la esencia de la empresa y afecta a cada uno de los departamentos de ésta, por eso es fundamental tenerla presente y transmitirla correctamente.
La formación adecuada de un líder promete que los empleados actuales estén por el camino adecuado y se logre transmitir con entusiasmo a los nuevos empleados el conocimiento de la cultura de la empresa.
Un empleado feliz y comprometido con su trabajo siempre va a resultar un beneficio para la empresa. Según el World Happiness report 2017, se comprobó que el jefe o superior es un rol sustancial en el bienestar del empleado.
Un liderazgo efectivo aumenta el compromiso del empleado y reduce los costes de reemplazo. Demuestra a los empleados el impacto positivo de su trabajo individual en los objetivos de la empresa. Los buenos directivos contratan e inspiran a buenas personas. Un directivo mediocre nunca atraerá o mantendrá a empleados de alto rendimiento.
Todos sabemos que las cosas a veces no salen como lo planeamos, por eso es vital tener un “Plan B” y un equipo preparado para evitar estancamientos. Un buen líder siempre está a la delantera y forma a las personas para responder de manera rápida a aspectos impredecibles.
La formación en liderazgo no solamente es útil para aspectos del día a día en la empresa, es útil especialmente en momentos críticos como por ejemplo, un cambio drástico, accidentes, reducción de personal, restauración corporativa, cambios de políticas, entre otros.
Los mensajes emitidos definen la trayectoria del negocio, además de ser un claro reflejo de la cultura de la empresa. Es fundamental que el mensaje se transmita correctamente, es fácil dar un mensaje erróneo y causar conflictos.
En una buena comunicación el líder además de transmitir el mensaje también se encarga de recibirlo para poder detectar brechas o conflictos desde cualquier perspectiva.
La formación permite al líder la posibilidad de adaptar los mensajes dependiendo del receptor, es decir cada persona tiene un estilo de aprendizaje distinto. Un buen líder logra detectar el estilo de cada individuo y modificar la comunicación dependiendo del caso.
Los buenos líderes inspiran a los otros a ser mejores. Los programas formativos de liderazgo permiten ver desde el comienzo el entusiasmo y motivación de cada participante y se crea una “sana competencia” que ayuda a motivarse unos a otros, además de la posibilidad de construir fuertes lazos entre participantes.
El objetivo de todo esto evidentemente es poder impactar en los resultados. La formación en liderazgo produce beneficios tangibles y mejoras concretas en el proceso de alcanzar objetivos. Un estudio de Mckinsey, descubrió que los participantes en formaciones y programas de liderazgo sobresalen en desempeño en comparación con los que no participan.
Para terminar…
La empresas y los equipos pueden rendir mejor cuando existe una fuerte presencia de un liderazgo efectivo para minimizar errores y maximizar resultados. Existen distintas maneras de formar a tus futuros líderes, desde programas de coaching y tutorías o capacitaciones a través de Gamificación o e-learning.
Al implementar un programa de liderazgo no solamente estarás impactando en el desarrollo de grandes líderes, sino también estarás educándolos como quiere la empresa, es decir en aspectos importantes que puedan resultar beneficiosos para el negocio en particular.
Publicado por Gabriela Alvarez